Recursos del tema: Textos Imágenes Rótulos

Células propias del tejido conjuntivo

Las células propias (o fijas) del tejido conjuntivo son los fibroblastos, los miofibroblastos y las células reticulares. Todas ellas participan en la síntesis, mantenimiento y organización de la mayor parte de los componentes de la matriz extracelular de este tejido.

Los fibroblastos y miofibroblastos se localizan en el tejido conjuntivo en general, tanto de vertebrados como de invertebrados, mientras que las células reticulares son propias del tejido conjuntivo reticular de los vertebrados.

Fibroblastos

Los fibroblastos se encuentran, generalmente, entre las fibras del tejido conjuntivo y en estrecha relación con ellas. Tienen forma de huso en corte longitudinal. La parte central de la célula aloja el núcleo, grande y eucromático, con nucleolo bien desarrollado, y el citoplasma perinuclear es basófilo. Los extremos celulares son alargados y siguen el recorrido de las fibras conjuntivas.

Los fibroblastos muestran actividades histoenzimáticas, como la fosfatasa alcalina, relacionadas con su actividad de síntesis y renovación de la matriz celular.

A MET, el núcleo de los fibroblastos presenta eucromatina y un anillo de heterocromatina periférica. El citoplasma perinuclear es abundante y contiene numerosos polirribosomas y muestra un desarrollo notable del aparato de Golgi y de cisternas alargadas del retículo endoplasmático rugoso y más moderado del liso. También se encuentran numerosas vesículas de transporte y de exocitosis.

Todos estos elementos participan en la síntesis y liberación al medio intercelular de los componentes de la sustancia fundamental y de las fibras conjuntivas, con las cuales los fibroblastos establecen una estrecha interacción.

Ultraestructuralmente, también se observa que, a partir de los extremos del citoplasma perinuclear, los fibroblastos emiten largas y delgadas ramificaciones laminares, entre las cuales se disponen las fibras conjuntivas.

Los fibroblastos son abundantes en el tejido conjuntivo en formación y en remodelación, en los cuales su estructura se corresponde con la de células activas en la síntesis de la matriz conjuntiva. Además, los fibroblastos son células móviles y tienen capacidad proliferativa.

En el tejido conjuntivo maduro y con poca actividad de renovación, los fibroblastos se encuentran en un estado inactivo en la síntesis de componentes de la matriz. Entonces adquieren la morfología de fibrocitos.

A microscopía óptica, los fibrocitos se caracterizan por tener una forma más alargada, núcleo en el que predomina la heterocromatina y citoplasma escaso y acidófilo, que queda enmascarado por las fibras conjuntivas.

A MET, los fibrocitos tienen un núcleo más electrodenso y de contorno irregular y el citoplasma perinuclear queda reducido a una estrecha banda.

Los fibrocitos participan en el mantenimiento de la matriz extracelular y, cuando es necesario, pueden revertir al estado de fibroblasto.

Miofibroblastos

Los miofibroblastos son células que comparten características estructurales y funcionales con los fibroblastos, pero que tienen capacidad contráctil, asemejándose también a células musculares lisas. Así, desarrollan un abundante citoesqueleto de actina del tipo del musculo liso.

Al igual que los fibroblastos, los miofibroblastos tienen forma de huso, con núcleo eucromático y citoplasma perinuclear que contiene orgánulos de síntesis de componentes de la matriz extracelular conjuntiva.

De los extremos del citoplasma perinuclear parten largas ramificaciones celulares, las cuales discurren entre fibras conjuntivas. Debido a su contractibilidad, tanto el contorno nuclear como el celular y el de las ramificaciones suelen aparecer fruncidos.

Los miofibroblastos se localizan en tejido conjuntivo en formación y en proceso de reparación, en los que tienen una función importante en la estructuración y modelado del tejido. También se localizan de forma permanente en el tejido conjuntivo de sostén (lámina propia) de algunos epitelios, como en el hígado o el de los túbulos seminíferos.

Células reticulares

Las células reticulares se caracterizan por presentan forma estrellada, con un cuerpo celular del cual parten varias ramificaciones con diferentes orientaciones. El núcleo es poligonal y eucromático, generalmente con nucleolo bien desarrollado.

Las ramificaciones de las células reticulares, que contactan entre ellas y se asocian a fibras reticulares, forman una red en cuyos huecos se alojan otras células, tales como leucocitos o estructuras glandulares.

Al igual que los fibroblastos, las células reticulares muestran perfiles histoenzimáticos relacionados con la síntesis de los componentes de la matriz, como la actividad fosfatasa alcalina.

A MET, el núcleo de las células reticulares es eucromático y muestra una banda de heterocromatina periférica. El citoplasma perinuclear contiene la mayoría de los orgánulos de síntesis, incluyendo polirribosomas, dictiosomas del aparato de Golgi y cisternas del retículo endoplasmático rugoso.

Las ramificaciones celulares se asocian a fibras reticulares, de forma que muchas veces los haces de estas fibras quedan rodeados por una sola de las ramificaciones, la cual se cierra sobre si misma.

También, las ramificaciones de las células reticulares pueden contactar con las de las células reticulares vecinas o con las de otras células, para formar una red celular que deja espacios intercelulares amplios.

Las células reticulares forman el tejido conjuntivo reticular, en el cual predominan las fibras reticulares.

Up